13 Oct 2024
Inflación a la baja
Argentina registró en septiembre una inflación mensual del 3,5%, el nivel más bajo desde noviembre de 2021, lo que se traduce en un aumento acumulado interanual de los precios del 209%. Esta desaceleración se atribuye principalmente a un aumento moderado en los precios de los alimentos.
La reducción de la inflación y del déficit fiscal son, de hecho, los resultados más notables de las medidas emprendidas para reequilibrar el panorama macroeconómico. Tanto Milei como su ministro de Economía, Luis Caputo, han celebrado el dato de inflación, aprovechando para defender la política de austeridad y ortodoxia fiscal. También las IFI y otros observadores valoran positivamente este resultado. Por ejemplo, el Banco Mundial reconoce la reducción de la inflación como un "increíble logro". Sin embargo, como advierten muchos analistas, esta desaceleración obedece, en buena parte, a la caída del consumo derivada de las medidas de austeridad y del hecho de que los aumentos salariales y de pensiones no se han acompasado con la inflación. La contracción del consumo va a repercutir necesariamente sobre la actividad económica (el Banco Mundial prevé una caída del PIB del 3,5% para este año) y el empleo, en un momento en el que las cifras de pobreza son las más altas de los últimos 20 años. Se calcula que más del 50% de la población vive en condiciones de pobreza y la indigencia alcanza al 18%. Con todo, el Banco Mundial se mostró optimista sobre el rebote que puede presentar la economía a partir de 2025, señalando que “la clave para seguir progresando es tener las cuentas en orden para tener una política monetaria sensata”. En este sentido, identifica la recuperación del sector de automóviles, de motocicletas y bienes raíces como indicadores positivos de cara a la recuperación económica.