¿Ofensiva terrestre en el Líbano?

Asimismo, retó a Netanyahu a invadir el sur del Líbano, advirtiendo que “si para ellos es una amenaza, para nosotros es una oportunidad”. Por su parte, el primer ministro israelí afirmó: “hemos golpeado a Hezbolá como no imaginaban, si no han entendido el mensaje, lo harán”. Estos acontecimientos suponen una vuelta más en el complejo y enrevesado escenario geopolítico de la región. En los últimos días Israel ha reforzado el contingente militar desplegado en la frontera y ha intensificado los ataques aéreos contra objetivos de la milicia. En esta ocasión el alcance de la ofensiva no se ha limitado a la zona fronteriza, sino que, además, se han bombardeado infraestructuras situadas en la capital. El 20 de septiembre aviones F-35 destruyeron un edificio en el suburbio de Dayihe, en el sur de Beirut; un ataque que acabó con la vida del jefe de las fuerzas de élite de Hezbolá, Ibrahim Aqil. Así pues, el conflicto se está desplazando progresivamente hacia uno de los escenarios menos deseados. A día de hoy resulta difícil anticipar hasta dónde escalarán las hostilidades en las próximas semanas. Ninguna opción debe descartarse. Una de ellas es la posibilidad de que Israel aproveche la situación de debilidad y paranoia en la que se encuentra Hezbolá para iniciar una ofensiva terrestre; un escenario sugerido en los últimos días por miembros del gobierno hebreo.