08 dic 2025
China protesta ante la firma del Taiwán Assurance Implementation Act
A pesar de los temores en sentido contrario, la Administración Trump parece moverse todavía en los márgenes de la tradicional ambigüedad respecto a Taiwán.
El pasado 24 de noviembre, en la conversación telefónica entre Xi y Trump de cara a establecer una hoja de ruta para enterrar definitivamente el hacha de guerra comercial, ambos líderes parece que trataron el tema de Taiwán. Trump habría reconocido en dicha conversación la “importancia central” de la isla para China. Esto disparó una vez más las especulaciones sobre la posibilidad de que Trump usase Taiwán como moneda de cambio en las negociaciones y, abandonara a la postre la defensa de la autonomía de la isla.
Sin embargo, el pasado 2 de diciembre el Presidente firmaba el Taiwan Assurance Implementation Act o Ley de Implementación de la Garantía de Taiwán. Se trata de una enmienda crucial a la ley de 2020, cuyo propósito principal es fortalecer la relación entre EE.UU. y Taiwán al exigir la revisión periódica de las directrices que rigen el contacto oficial del Departamento de Estado con la isla. Esta legislación obliga al Secretario de Estado a asegurar que dichas directrices reflejen la importancia de Taiwán como socio democrático clave y a identificar y levantar las "restricciones autoimpuestas" a sus propios funcionarios al interactuar con Taipéi, una medida que profundiza la conexión oficial. China calificó la ley como una "grave injerencia en los asuntos internos de China". El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Lin Jian, declaró que la cuestión de Taiwán es el "núcleo de los intereses fundamentales de China" y la "primera línea roja que no debe cruzarse" en las relaciones entre China y EE.UU. Exigió a Estados Unidos que "detenga la interacción oficial" con la "región de Taiwán de China en cualquier forma" y que no envíe "señales erróneas a las fuerzas separatistas de la 'independencia de Taiwán'".